Desde el punto de vista fisiológico la podemos definir como la transferencia de polen desde las anteras al estigma de las flores.
Desde un punto de vista productivo, el proceso de polinización es el inicio del desarrollo del fruto, objeto de nuestra preocupación. Muchos de los esfuerzos realizados en el campo habrán sido en vano si el proceso de polinización no se desarrolla adecuadamente
Este proceso es llevado a cabo por distintos agentes polinizadores.
Existe una serie de agentes que participan directa e indirectamente en el proceso de polinización, entre ellos podemos mencionar el viento, el agua, pájaros e insectos.
Sólo los insectos relacionados con las flores pueden ejercer una función polinizadora eficiente, como son grupos de Coleópteros, Lepidópteros, Dípteros e Hymenópteros.
Los Hymenópteros conforman el grupo más importante de insectos polinizadores, entre los podemos encontrar abejas y abejorros.
Los abejorros pertenecen al orden Himenópteros, familia Apidae. La especie generalmente utilizada para la polinización corresponde a Bombus terrestris, especie que posee mayor adaptación a sistemas de crianza artificial y un comportamiento favorable en la polinización bajo invernadero como también al aire libre.
El abejorro se caracteriza porque su cuerpo está cubierto de finas vellosidades, siendo el color de éstas característico de cada especie. Estas vellosidades permiten al insecto transportar una mayor cantidad de polen en su cuerpo al visitar las flores. Poseen además en sus patas unas estructuras denominadas canastas en las cuales el abejorro transporta el polen en forma de masas granuladas. Solamente las hembras poseen estas estructuras, por lo que solo ellas colectan polen. Este alimento es rico en proteínas, pero además los abejorros necesitan una fuente de energía, la cual es proporcionada por el néctar de las flores. Es la necesidad de conseguir alimento lo que los lleva a visitar las flores.
Los abejorros no solo se utilizan en la polinización del tomate, sino que se han extendido a diversos cultivos hortícolas como berenjenas, pimentones, ají, zapallo y melón, además de frutales como almendro, ciruelo, cerezo, kiwi, arándanos, paltos, manzanos perales, entre otros.
Los abejorros son recolectores individuales, cada uno vuela su propia ruta para recolectar alimento. Los integrantes de una colmena no se comunican acerca del lugar y la cantidad de alimento que encontraron, por lo que cada uno debe visitar distintas flores. Esta conducta es la que permite que los abejorros sean capaces de visitar un gran número de flores en un corto período de tiempo.
Siempre que existan las condiciones de clima adecuadas una colmena de abejas puede realizar un trabajo de polinización extraordinario.
El abejorro se ha convertido en un excelente complemento, ya que trabaja en condiciones climáticas que la abeja no. Sobre todo bajo coberturas ya sea techo o invernaderos, en días nublados con bajas temperaturas y lloviznas leves, condiciones permanentes en las primaveras Chilenas.
Además, en condiciones climáticas aún más extremas el abejorro por si solo a pasado a ser un buen sustituto como agente polinizador.
La organización social de la colmena es similar a la de las abejas. Una colmena está compuesta por una reina fundadora, las obreras y estados juveniles (huevos, larvas y pupas). Hacia el final de la vida de la colmena aparecen en el nido las reinas jóvenes y los machos, los cuales se aparean durante el verano-otoño para asegurar su descendencia.
La mantención del nido es responsabilidad de las obreras, por lo que son éstas las encargadas de colectar el polen. De esta manera, el trabajo de polinización depende de la cantidad de obreras que posea la colmena. Los machos no participan activamente del trabajo de polinización, ya que solo buscan en las flores alimento (néctar) para su propia mantención, pero no para alimentar a las crías.
El equilibrio de los estados juveniles de una colmena es fundamental para la duración y óptimo funcionamiento de la colmena.
Huevo 5-6 Días
Larva 8-10 Días
Pupa 7-10 Días
BioCruz S.A. produce diversos tipos de colmenas según cultivo o variedad. La diferencia radica en cuanto al número de nodrizas iniciales. Es así como para cultivos de periodos de floración cortos el número inicial de Nodrizas listas para trabajar es mayor a aquellos cultivos de floraciones largas.
El ciclo de vida de los abejorros es relativamente corto, por lo que una colmena puede vivir entre 7 y 12 semanas. La vida promedio de las colmenas no solo depende de la calidad del nido, sino que también de los factores externos, como el clima y la aplicación de agroquímicos, los cuales influyen tanto en su desarrollo como en el largo de su período de vida.
Nuestras colmenas cumplen con todos los requisitos que el SAG ha impuesto entre ellos contar con un excluidor de reinas el cual no puede ser removido de la colmena. Ver Resolución 5889/2019
Las colmenas de abejorros son distribuidas en cajas de cartón y/o plástico, en cuyo interior se encuentra el nido. En la base de la caja se ubica un dispensador de jarabe, el cual reemplaza el néctar de las flores ya que, en algunos casos como el cultivo del tomate y kiwi, sus flores no contienen néctar.
Posee además un sistema de control para regular el ingreso y salida de los abejorros hacia y desde la caja, lo que permite controlar la actividad de las colmenas en determinadas circunstancias.
Classic
Colmena de cartón y plástico. Embalaje de cartón tapa encerada.
Classic todo clima
Colmena de cartón y plástico. Embalaje de Kartonplast
Plastic Bio
Colmena interior de plástico. Embalaje de cartón, tapa encerada.
Duo Bio todo clima
Dos colmenas de cartón embaladas en Kartonplast.
Los frutos polinizados con abejorros alcanzan un mayor peso y calibre, además de mejorar sus características organolépticas debido a que al transportar una gran cantidad de polen al estigma de la flor, logra fecundar un mayor número de óvulos que darán origen a las semillas. La presencia de semillas favorece el engrosamiento de las paredes del ovario. Lo que da mayor consistencia al fruto. Esta característica es claramente perceptible en frutos como arándano, kiwi, frutilla, frambuesa, tomate, pimentón, ají etc.
Los abejorros pueden ser utilizados exitosamente en la polinización de diversos cultivos, tanto hortalizas como frutales y producción de semillas.
Una ventaja importante de la utilización de abejorros es el hecho de que las obreras visitan la flor en el momento que ésta se encuentra en el estado adecuado para ser polinizada (estigma receptivo y óvulo viable), lo que garantiza la cuaja y crecimiento del fruto al disponer de polen viable y temperaturas apropiadas para su germinación.
La utilización de abejorros en la polinización requiere cuidados básicos pero determinantes en el éxito de su aplicación. Por este motivo, la información que se detalla a continuación ha sido desarrollada BioCruz S.A. en base a su experiencia de campo y el conocimiento generado a partir de la crianza artificial de estos insectos.